sábado, noviembre 12, 2005

EL DIABLO METIÓ LA MANO

Todos sabemos como Prisa controla a su gusto el EGM. Ahora Polanco metió la zarpa en la televisión en abierto, y para que Cuatro gane dinero necesita controlar también el sistema de medición de audiencias en televisión.

Lean la siguiente información resumida de dos fuentes LD, ECD:

Sofres Audiencia de Medios S.A. es la empresa que tiene el monopolio de la medición de audiencias en España. Sofres dispone de 3.305 aparatos electrónicos conocidos como audímetros repartidos en el mismo número de hogares que determinan el comportamiento frente al televisor de 9.019 individuos repartidos por España.

A cada persona se le asigna una letra en un botón de un mando a distancia que debe pulsar cada vez que enciende o apaga el televisor, o cada vez que empieza a ver o deja de ver televisión. Durante las 24 horas del día el audímetro registra todos los cambios que se han ido produciendo en los distintos televisores del hogar, hasta que cada madrugada recibe la llamada del ordenador central de la empresa señalada y vuelca toda la información almacenada. Se ofrece información minuto a minuto de los comportamientos de la audiencia.

Las cadenas privadas de televisión pidieron explicaciones a Sofres después de que el lunes los informativos de Iñaki Gabilondo en Cuatro mostraran entradas y salidas repentinas de espectadores en el mismo minuto. Los datos mostraban que en varios momentos hubo entre dos y dos millones y medio de telespectadores que encendía y apagaban sus televisores al mismo tiempo.

Destaca que la aparición de más de dos millones de espectadores se alternara con un abandono de público casi en la misma cantidad. Así, la "curva de la audiencia se convirtió en una línea casi recta, sin apenas oscilaciones. Además, para sorpresa de los operadores más veteranos, esta homogeneidad de entradas y salidas tuvo lugar "al margen de las afinidades del mercado (o ciudad) analizado" con la oferta concreta.

El informativo de Iñaki Gabilondo concentró finalmente a una media de 2.472.000 de espectadores con un 15,1% de cuota de pantalla. El momento mas visto concentró una media de 6,5 millones de telespectadores.

Tanto Antena 3 y Telecinco entienden que lo ocurrido con el estreno de Cuatro les llevará a aplicar una "exhaustiva vigilancia" sobre los datos que suministre a partir de ahora Sofres. El director general de Sofres, Alberto de Pablo, aseguró que el problema se debía a un "error informático en el software de análisis de migración de espectadores".

El malestar aumentó el martes, cuando los datos que reciben las cadenas sobre las ocho de la mañana no llegaron hasta las 13:00 horas. Alberto de Pablo dijo también que "el retraso en la entrega de datos sólo ocurre de forma controlada dos veces al año, coincidiendo con el cambio horario de invierno y de verano, y como mucho otras dos o tres de forma inesperada por causas informáticas. Esta vez ha coincidido con el estreno de Cuatro y ha sido más llamativo. Lo lamentamos. Las audiencias que Sofres distribuyó en todo momento fueron las correctas".


Conclusión:

Resulta que millones de euros en publicidad y varias empresas de televisión con sus trabajadores dependen de los datos suministrados por una sola empresa que a su vez recibe los datos de solo tres mil y poco aparatos de manera electrónica. Si antes el sistema me parecía flojo y fácilmente bordeable, imaginaos lo que habrá pensado Polanco.

Y lo que pasó el lunes justo en el momento del estreno de Cuatro es como todo lo que sucede en España fruto de la “casualidad”. Los socialistas dirán que son manifestaciones de la “espontaneidad” de los televidentes.